Reseña de Firmamentos ocaso, de Eduardo Omar Honey Escandón

Eduardo Omar Honey Escandón: Firmamentos ocaso, Ápeiron Ediciones, Madrid, 2023, 96 págs.

 

 Nos encontramos ante la colección de relatos de uno de los escritores más destacados de la generación 2020-2022 del Soconusco Emergente, un proyecto de editorial social de territorio del Soconusco, en el estado mexicano de Chiapas. Eduardo Omar publica habitualmente poesía y narrativa en muchas revistas especializadas —físicas y virtuales—, así como en Internet, lo que es, a nuestro parecer, algo muy conveniente, pues la prolificidad literaria es buena siempre y ayuda a mejorar el estilo. Por ende, no es de extrañar que haya recibido numerosos premios y que sus textos hayan aparecido reproducidos en antologías varias. El autor se halla decidido a controlar y mejorar su prosa, y participa con regularidad en todo tipo de talleres de escritura, pues sabe que el de narrador es un oficio que que siempre puede seguir aprendiéndose.

Firmamentos ocaso consta de ocho relatos variados e ilustrativos cada uno de ellos de una realidad y de un mensaje diferentes. Con un estilo directo y sin desviaciones, con claridad y dominio de las técnicas narrativas, el narrador capta nuestra atención mediante un hábil empleo del tiempo presente y de la primera persona, dosificando acertadamente diálogo, descripción y pensamiento.

En «Máscaras» mezcla sutilmente el poder evocador del arte con la cruda realidad de la guerra. «Alas de rosas» cuenta una bella historia de amor, boda y misterio alrededor de unas rosas y unos sobres que se envían. «Esfinges» nos describe un crimen contado por quienes conocieron sus circunstancias. «Ojos-de-mar» nos adentra en el mundo de los talleres literarios, con la misteriosa aparición de una mujer «escrita» en sus tatuajes, que nos recuerda aquella bella y famosa historia de Ray Bradbury en El hombre ilustrado donde los tatuajes de su cuerpo cobraban vida. Aquí, Eduardo Omar sabe darle al tema un nuevo y original enfoque. «Astrea» penetra en el mundo mágico de una niña y mujer que recibe en sí los rayos del cielo, sobrevive como por milagro y su vida cambia radicalmente. «El que paga manda» explora los problemas de la convivencia humana y la lacra del hacinamiento. «Tsatsa», de ambientación brasileña, gira en torno a un gato al que le sucede... pero no es cuestión de desvelar tramas, sino de indicar ambientes excelentemente construidos. «Mariposas negras», narración con la que se cierra la colección, no es en absoluto inferior a las que la preceden y nos presenta un submundo moderno y atrasado a la vez.

Aparte del interés indudable que generan las historias, su lectura es enriquecedora por la habilidad dialogal que muestra el autor: diversas hablas, coloquialismos, regionalismos, idiolectos para cada cada uno de los personajes. Y asimismo dominio de la descripción —como la lograda sensualidad del episodio de la mujer tatuada cuando se desnuda ante los presentes— y capacidad de poetizar la prosa, insertando acertadas y elegantes metáforas cuando el lector menos lo espera, lo que contribuye así a la calidad de página de los relatos.

Un libro para disfrutarlo en su totalidad.